Aerosmith en el Estadio Único de La Plata
¿Y el tren seguirá rockeando?
Reseña y fotografía por Eduardo Cesario
Empecé a escribir esta especie de reseña en mi mente como quince veces antes de efectivamente ponerme a hacerlo para esta publicación: esto es así dado que muchísimas ideas y sensaciones se entremezclan a la hora de tratar de ser fiel a lo que pude disfrutar y vivenciar en el concierto de Aerosmith en el Estadio Único de La Plata, el pasado 8 de Octubre.
Aerosmith llegó a Argentina para presentar lo que sería su última gira, Rock’N Roll Rumble: Aerosmith Style, al menos con este lineup que cuenta con el carismático y talentoso frontman, Steven Tyler. Es que al parecer Tyler querría tomarse un tiempo fuera de la locura rocanrolera para perseguir un proyecto solista que nada tiene que ver con la aceitada maquinaria de la banda.
Así las cosas el tan ansiado día 8 de Octubre llega para el público argentino residente en Buenos Aires y alrededores (ya que tres días antes habían tocado en Córdoba), que con muchísima expectativa esperaba el regreso de la banda; las visitas anteriores al país habían sido en los años 1994 (en dos ocasiones), 2007, 2011 y 2013.
El concierto abre a todo vapor, con Steven Tyler fiel a su estilo de contorsiones y locura aullando el famoso «I’m baaaack»… si, están de vuelta, y el público enloquece. La selección de temas que arrancan el set son de éxito garantizado: Back in the Saddle, un clásico del álbum «Rocks» perteneciente a los 70’s, y Love in an Elevator, directo de los 80’s del también clásico álbum «Pump». Steven Tyler junto a Joe Perry son la sociedad perfecta para que estas primeras selecciones demuelan todo: acto seguido sería el momento de Cryin’, marca registrada de «Get a Grip», el último gran álbum de los 90’s con el que se catapultarían definitivamente al estrellato internacional. Jaded, otra canción a un tempo moderado y con vicios propios de la banda precedería a el segundo hitazo de Get a Grip: Crazy.
Grata sorpresa es ver a un Joe Perry completamente recuperado del episodio de salud que había pasado hace poco tiempo cuando se estaba presentando con su proyecto paralelo, The Hollywood Vampires. Siguiendo con el show es el turno ahora de Last Child, Livin’ on the Edge (otro clásico de los 90’s, del interminable «Get A Grip»), Rats in the Cellar machacando imparable, Dude (Looks Like a Lady) y Same Old Song and Dance.
Chip Away the Stone deja en claro que Perry y Tyler son una combinación explosiva, y me resulta imposible no trazar un paralelo entre este tandem con Jagger/Richards. Es que Perry tiene el germen de Keith en su forma de plantarse en el escenario, aunque claramente despliega un virtuosismo de blues mixturado con rock’n roll y hard rock de factura superior al Stone.
Siguen la clásica Rag Doll para pasar a un cover, el primero de la noche, de Fleetwood Mac: Stop Messin’ Around, con Joe Perry en la voz principal. Otra sorpresa sería la propuesta de casamiento de una pareja de novios en el escenario, que dará lugar a la balada I Don’t Want to Miss a Thing, otro inoxidable cliché de los 90s.
Aerosmith marcha como un tren a toda velocidad y eso es el resultado de contar con una base rítmica precisa, compuesta por Tom Hamilton en el bajo eléctrico y Joey Kramer en la batería. Hamilton hace uso de su instrumento de manera pulcra y precisa, y cuando es necesario toma el protagonismo con algún solo o base más al frente. Kramer es el reloj que marca el tempo, intensamente. El guitarrista Brad Withford, sirve bases con los acordes de su guitarra y también aporta algunos solos en momentos oportunos del concierto.
Volviendo a éste, es momento de Come Together de The Beatles (el segundo cover de la noche), imperecedero clásico al cual le siguen otros dos, uno de factura propia: Walk This Way, y Train Kept A-Rollin’, cover de Tiny Bradshaw. En este momento de euforia total, y ya pasadas casi dos horas de performance. la banda abandona el escenario para tomar un breve respiro antes de los bises: la emotiva Dream On, directamente del primer álbum de la banda «Aerosmith» y uno de sus más memorables éxitos, para un un final a todo rock ‘n roll con Sweet Emotion, con la yapa de Tyler cantando un fragmento de Communication Breakdown de Led Zeppelin.
Este modesto observador se resiste a pensar que Steven Tyler podrá privarse de cantar, encantar y seducir al público mediante sus contorsiones y dotes escénicas. Será acaso la última vez que esta mítica banda, marca registrada del rock norteamericano que ha acuñado tantos éxitos y un estilo propio, recorra los escenarios mundiales?
No sería del todo lógico que Aerosmith abandone las giras después de haber brindado un show de rock ‘n roll como hace años no veía por estas tierras. Es justo colgar los guantes en buena forma, siempre se escucha esa frase cuando se habla sobre la conveniencia de seguir tocando riesgo de bajar el nivel musical de un grupo de rock… ¿o es acaso oportuno el retirarse en un gran momento…?
No lo sabemos, el tiempo dirá que ocurre, mientras tanto me reservo la esperanza de que el tren siga rockeando.
8/10/2016, Estadio Único de La Plata / ©2016 Eduardo Cesario / Rock Imagery
Lugar: Estadio Único de La Plata | Fecha: 8/10/2016